Tarajal

El 6 de febrero de 2014, 15 personas migrantes murieron ahogadas en la playa de Tarajal, situada en la frontera entre Ceuta y Marruecos, mientras la Guardia Civil disparaba pelotas de goma y botes de humo al agua. Muchos de los cuerpos no han sido identificados por lo que no han podido ser devueltos a sus familias. De esta forma, muchos de ellos han sido enterrados sin nombre en cementerios de Ceuta. El caso fue archivado y tras varias luchas de distintas organizaciones, reabierto. En enero de 2018 la Audiencia volvió a archivar el caso sin tomar declaración a dos de los supervivientes, y sin esperar la remisión de las autopsias por parte de las autoridades marroquíes.